jueves, 26 de marzo de 2020

PUNO YORK, de Nelson Van Jaliri


 Poemario publicado en Cochabamba el año 2017



PUNO YORK
Vista con los Ojos Rojos del Poeta





NELSON VAN JALIRI











ventana…
una mirada
distinta al recuerdo
































a los amigos peruanos de Puno

Efraín Serpa Lope
Pilar Vilcapaza
Pedro Ticona Salas
Milagros Humalla Calsina

a todos aquellos
que todavía juegan conmigo




















IMPRÓLOGO


mi andar
se hace espacioso
              profundo
recodo mental
geografía teñida
e ignorada
desde afuera

no todos los caminos
caminan solos
arrastrando polvareda
es un dolor que duele
menos que una muela






















POÉTICA
vista con los ojos rojos del poeta  viajero




















con una línea reconocí
el horizonte de Puno York
a primera hora
de la mañana gris
envuelta en pañales

la muerte llegaba
con suave rumor anticipado
no era la puna del altiplano
era la puna del
                   TITICACA
extendía su brazo
al lago extenso

































andar
caminar
los pasos
no  van solos

este caminar abrupto
me abruma por ser lo que no soy
mi propia sombra
pero cuando
 voy  solo sin sombra
mi andar se hace
por varios caminos
de donde acabo
claro está…de salir

































con una línea encima
            del horizonte
Puno York reconoce
su propio paisaje

paisaje
 lago
azul
un juego de palabras
silencio
una manera de soñar en pañales

no me ves ni me miras
tu enigmática sonrisa
mi corazón atado
divide kilómetros
hasta llegar
a la vela del lago





























a pesar
(la misma palabra
de siempre)
beben mis pasos
a la orilla de tu boca
desde esta distancia medible
  compruebo
por una milésima parte
no todo es la realidad
 descrita al paso
sobre mi propia máscara

Sillustani…
los urürus
ya no juegan conmigo
detrás de mi espalda
todos aterrizan
          en tinieblas
yo me hago a los locos
como siempre
desde siempre
y desde siempre atrás

























arapi matinal
sé que tengo
un olor a dragón

reniego por los calcetines
dejados ayer
sobre la mesa del Motel
a horas 12 de la media noche
donde tú no jugabas
         conmigo
ver tu propia máscara
deleitarme con tu sonrisa
aunque sarcástica
   por cierto

































cada minuto pasado
reniego por la distancia
  cuadrúpeda
de nunca empezar

pienso entonces
grabaré en tus chullpas
mi nombre Sillustani
       pos morten
con una navaja destentada

vivir dentro de esas profundidades
hacerme al muerto
semejante a un perro
pero no como cualquier
  (perro)
sino como el perro
que fui antes





























Cutimbo
   hombre sabio
otro territorio recordado
deja la raíz nazca en este instante

sombra profunda
  enigmática
como el agua del TITICACA

rojos – azules – grises
mensajes ocultos
como la secuencia
rebuscada de sus pinturas

en lo alto
    paloma alada al viento
desde su propia sombra
      cubriente





























desayunaré desde este principio
hasta el final de los días
   en buena hora
llorando con un olor a espanto
por si acaso deje de caminar
  saltar
en las cajas
extensa ciudadela
                  Puno York

(poema cortante)

de tanto verte
    viajar
    recorrer
con un ojo
página tras página
no importa si no salgo
       de atar
cada una de esas calles
        mentales



























lo dicho ya está
es un confuso pasaje invertido
   remoto
   distante

¿por qué tantas palabras
si estoy ahí a escondidas?

donde tú no estás
                    ni para verte
                    ni oírte
oler lo que no puedo oler
es mejor callarse
masticar una manzana
ver con el otro ojo
                 el otro
y a ve otra cosa
no es para alabar
pero ver otra cosa




























precipitado
      máscara
robada
morenada
repintada
    diablada
desenfocada
todo da
la misma sonrisa
distante tiniebla
lentamente se acerca
cubre la sombra
la misma sombra
donde como caído del cielo
                               descanso
saciado
extasiado
de tu sombra





























los sueños
      son sueños
tú eres
doblemente sueño

quisiera empezar
caminar por el tiempo
pero sobre mí
el tiempo pesa
debilita mis días inhumanos
arrepentido estoy aquí
despojado
      con un frío
hasta el cuello

































desde lejos
en la pared reposa
un afiche viejo y arrugado
azotado
  lentamente
por el bonito recorrer
de los días
      últimos días
de todos los santos

el tiempo
una ampolla extinguida

el carpintero da forma
lucidez a la ofuscación
































quisiera entender
por supuesto
tu voz
         aun no tiene TIEMPO
sobre mi propio tiempo

tiempo ausente
que no tiene tiempo

tu corazón
aún entiende
que tu tiempo
 es mío

transita el lago
su propio tiempo

mi tiempo yo recorro
donde tú aún no pisas

mi mente
aun recorre el lento caminar
             del tiempo
donde estás presente
en mi tiempo






















ahora que espero
también simplemente
algunas palabras
dejo mi chaleco
sobre la espalda del tiempo
para que tú pienses
el tiempo sigue descansando

el tiempo transita
alrededor del mundo
de mi mundo
tu mundo
algo parecido
que comer pipocas
en el cine
ver la película
mi película
tu película
que acaba…
seguro la mía
ya acabó
en una historia
de nunca acabar
























como el agua clara
como el agua oxigenada
mi caminar es lento
pausado como un Achachi
descalzo por la avenida

tú dices
yo me digo
los caminos se hacen
si no se hacen
dejarme… yo los hago
removiendo la tierra
aunque de sueños
pero dejarme soñar
vivir mi pesadilla
por lo menos un sueño
por lo menos
sentirme orgulloso
de no hacer nada




























hace poco
         de a poco
creo comprender
el rojo no es rojo
es más verde
que el color de tu chompa
el verde no es el verde del semáforo
no es el verde de tus ojos
                                      miento
tus ojos son negros
tu chompa sigue siendo
      VERDE
así con mayúsculas
tus ojos siguen siendo negros
cuando veo tus ojos
mi mundo
sigue siendo negro
¿habré muerto?
sigo viviendo
viviendo mentalmente


























el tiempo
bendito tiempo
es algo insensible
a los pensamientos
encarcelados
en el interior de una daza
de veneno caliente

lentamente muero
cuando tu presencia
se convierte en algo
en algo guardado
envasado
     en nada
no es nada
traspasa el tiempo































adagio:
el mirador de mis pensamientos
está junto a ti
la soledad es algo
acostumbrado a vivir
dentro de mí
cada poro
cada cabello
si es necesario
decir palabras
equivocadas
equívocas
santas palabras
dejar que la noche
siga su agenda
































los ojos
de la distancia
recargados
Achachi matinal
warüru
(miércoles)









































las almas
las almas
cuerpos inmóviles
quietas a través
del fondo
amarillentos
la muerte
aunque
de otro color
colores vemos
no sabemos




































dices
la sombra
es semejante
a la terquedad
lánguido
pesadilla inerte

solo la voz
se salva
no la tuya
ni la mía
es la voz
del silencio
no dice nada
mucho menos
cuando rebusco
la palabra pasmosa
simple palabra
cae muy fondo
una profundidad
donde sigue siendo
profundo
profundo
la palabra vacía
no dice nada
  nada
nada de nada
sigue siendo profundo
profundo
como la misma muerte

















una palabra
todas las palabras
     mueren
todas las palabras
     mejor
cada palabra mala
como uno quiera
                 dañar

determinado tiempo
poco duradero
como tener sexo
pierde sentido después


































frente a ti
lo primero que veo
profunda oscuridad
de tu boca redonda
salvaje
seca
sin agua

tengo sed
de tu boca
sigo peregrinando
aún en tu sombra



































la sombra
desde lejos dice

con cada ojo
te miro por detrás
de la nuca
debo darme la vuelta
te conviertas
en paisaje de agua

de reojo
no logro juzgar
si ere tú o yo


































cajas
sicus suenan
por detrás de mí
de frente
hay una sombra
recorre la línea
que nos divide
el camino no existe
no existe
    el camino
el camino no da
a nada
a nada
no asemeja
a camino
tampoco
misericordia






























me aprieta
en estas últimas líneas
tener una conciencia agresiva
todo se agita a mi alrededor
soy un agosto de cualquier año
los días no cuentan
ni las horas del atardecer
    es cierto
invaden cada paso melancólico
donde tú pisabas
retazos de mi piel…
donde yo me pierdo
mis ojos se inundan
a través del cráneo
mucho vino
mis ojos se quedan
en Puno York



La Paz, El Alto
Primavera 2016


No hay comentarios:

Publicar un comentario